Ya que está encima la Semana Santa y el buen tiempo, cuando muchos aprovechan las fiestas para realizar salidas a recoger minerales, creemos que es buen momento para recordar los riesgos inherentes a esta actividad de ocio. Para ello nada mejor que dar un repaso a los últimos acontecimientos que se han sucedido en este ambito. Quien no recuerda el accidente de Cerro Muriano, en Cordoba, donde dos aficionados quedaron atrapados en un derrumbe mientras buscaban fluoritas, con el triste resultado de la muerte de uno de ellos. Hace dos días ha muerto un geologo francés mientras recogía muestras en la Guayana, se le ha derrumbado la cantera encima y no se ha podido hacer nada por él. Hace una semana se ha admitido el procesamiento a los dueños de la cantera del Castellar, Cadiz, por la muerte de otro aficionado, Juan Francisco Espinosa, quien cayó en la balsa de lodos de dicha cantera y perdió la vida, se hace directamente responsables a los propietarios por no tener un vallado perimetral de la misma. En los últimos diez años se ha producido una larga lista de sucesos graves y un sinfín de pequeños accidentes que no han salido a la luz pública por la levedad de las lesiones.
Mientras estas desgracias ocurren, son cientos los aficionados que saldran este año a recoger minerales en plan dominguero, sin ningún tipo de precaución ni de material de seguridad, un ejemplo de esta desidia y despreocupación lo podeis ver en este video de la Cantera Santa Barbara, León, donde se puede observar, no sólo la falta de medios de seguridad empleados sino la inmersión en cavidades sin un mínimo de seguridad, se recomienda verlo hasta el final, como ejemplo de todo lo que no hay que hacer cuando se sale a recoger minerales: Luego nos extrañamos y clamamos al cielo porque se nos prohibe la entrada aquí o allá, lo extraño es que no ocurran más desgracias con la cantidad de irresponsables y tuercebotas que salen de minerales como quien va a pasear al parque. Extremad las precauciones, no piqueis donde el riesgo sea alto, vigilad donde pisais y lo que pende sobre vuestras cabezas, ninguna pieza tiene tanto valor como la vida humana. Y por supuesto, si salis, id bien equipados para cualquier contingencia, vale más cargar con un buen equipo que luego echarlo en falta.
Texto: Picapiedra
Fotografías: Diario de Cadiz y Testigo Directo Noticias.
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