Nada más llegar nos encontramos con una tienda de campaña instalada en el camino de bajada, a pocos metros de la verja, y un coche matricula extranjera. Comprobamos que se trataba de una pareja de ingleses, mientras él picaba en la zona ella leía un libro sentada en una toalla junto a la verja. También vimos a dos rusos, vestidos como si fueran a la guerra, totalmente de camuflaje, mientras que alguno de nuestros compañeros había intercambiado saludos y charla con los ingleses, en cambio con los rusos todo fueron miradas de desconfianza y mal rollito, como si les fueramos a quitar algo, dos imbeciles que se conoce que se habían separado de algún batallón de los de Afganistan y habían aparecido perdidos por estas tierras norteñas.
Tras pasar de largo de tanto turista, nos dirigimos a La Paredona, comprobando por el camino que el agua caida no había hecho grandes estragos en la zona, y que no se veían argayos interesantes. Fuimos recogiendo pequeñas muestras mientras los compañeros que no lo conocían charlaban sobre la cantidad de fluorita que allí asoma, la verdad es que la primera vez que se visita Berbes impresiona tanta veta.
Llegados a la pared nos dedicamos a seguir recogiendo muestras, nada especialmente reseñable, ya que toda esta zona es abundantemente picada, sobre todo en verano, pero si algo tiene Berbes es que nunca te vas de vacio, fueron apareciendo pequeñas geodas de cuarzo con fluorita que hicieron la delicia de los primerizos, y así entre picada y picada se nos fué la mañana. Me traje algunas cosucas que aqui os muestro, algun cubo biselado que me pareció curioso, otros cubos sobre cuarzo de bonito color, geodillas de cubos malvas con alguna calcita, y lo que más me gustó encontrar, una placa de pequeños cuarzos biterminados muy brillantes y que compartían espacio con baritas con inclusiones de calcopiritas.
Tras recoger, hacernos unas fotos y emprender la marcha, decidimos comer en Ribadesella, donde nos dimos un homenaje de fabada y fabes con almejas, que no se lo salta un gitano, intercambiando opiniones y planeando futuras salidas, una estupenda jornada que dimos por finalizada llegando a nuestras casas a eso de las 19.30h de la tarde.
Las piezas no fueron nada del otro jueves, las personas con las que compartimos el día fueron lo mejor, un saludo norteño para todos.
Texto e imagenes: Picapiedra
4 comentarios:
"las piezas no fueron nada del otro jueves"... y se me cae la baba viendo esas fluoritas. Decididamente tengo que ir al norte a buscar pedruscos.
Por cierto conoces alguna cantera o mina interesante cerca de Orense, mi lugar de veraneo familiar?
Un saludo...
Hola Angel, en Orense tienes las minas de Penouta, en Viana do Bolo, buenos berilos y fantasticas casiteritas. Sobre las fluoritas que ves en este articulo, son todas pequeñas de apenas 1 cm de arista, de aqui hemos llegado a sacar antaño hasta cubos de tres y cuatro centimetros (hoy practicamente extinguidos).
Un saludazo
Pablo
Hola Chicos, me gustaria saber como se llega a la cantera, pues estoy buscando algunas muestras de cuarzo.
Muchas gracias.
Hola Sherpa, es tan sencillo como llegar a Berbes y guiarte por la primera foto del reportaje, la de la playa de la Vega, la cantera está en el acantilado, a la izquierda de la playa.
Suerte.
Pablo
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