Este fin de semana pasado no hemos realizado la salida habitual del Mineral Digital, en su lugar le hemos dedicado un poco más de tiempo a la familia. Tras decidir con mi pareja hacer una visita a la vecina Asturias, nos pusimos en camino dispuestos a disfrutar de una jornada de holganza y pitanza en alguno de los pueblecitos y aldeas asturianos.
No era mi intención dedicarle ni un minuto al tema mineralógico, a pesar de que siempre llevo algunas cajas en el maletero del coche con muestras de intercambio. Fruto del aperitivo que estábamos tomando en una terraza, supimos de la existencia de un minero de la explotación Emilio de Loroñe, quien tenía algunas piezas en casa y quien coleccionaba minerales. Ni corto ni perezoso me dispuse a ofrecer un intercambio con él. Tras comprobar las piezas que tenía en su poder, elegí alguna muestra variada ya que la mayoría adolecían de toques o cristales rotos.
Tras apalabrar las piezas que le gustaron, me terminé decidiendo por media docena de fluoritas con barita, dichas fluoritas con inclusiones de hidrocarburos y algunos cristales curiosos. Aquí os las muestro para que quede nota de que aún saliendo de ocio, siempre vuelvo a casa con más piedras.
Luego y tras un homenaje gastronómico, le dediqué la tarde a la chavala e intenté quitarme los minerales de la cabeza, cosa harto difícil hallándonos en una zona minera.
Texto e Imagenes: Picapiedra
Este fin de semana pasado no hemos realizado la salida habitual del Mineral Digital, en su lugar le hemos dedicado un poco más de tiempo a la familia. Tras decidir con mi pareja hacer una visita a la vecina Asturias, nos pusimos en camino dispuestos a disfrutar de una jornada de holganza y pitanza en alguno de los pueblecitos y aldeas asturianos. 
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